El Refuge du Goûter, un refugio para montañistas en Francia ubicado a 3.800 metros sobre el nivel del mar, es un edificio autosustentable que depende de la nieve y el sol para obtener energía.
Cuando en 2013 finalmente se inaugure el Refuge du Goûter, un refugio a 3.800 metros de altura, los montañistas que se embarquen en la aventura de escalar el Mont Blanc (el pico más alto de Europa Occidental, con más de 4.800 metros) y lleguen hasta ahí se encontrarán con un escenario distinto por primera vez en 50 años. Es que el edificio de cuatro pisos y 16 metros de alto, fabricado en madera ecológica, revestido en acero inoxidable y completamente autosustentable reemplazará al asilo anterior, una edificación de 1960. Diseñado por el arquitecto francés Hervé Dessimoz, el proyecto demoró cinco años y el edificio tres en conluirse, porque solo se podía trabajar en verano por el riguroso clima del lugar. También por esto, hubo que encarar todo el ensamble en el sitio y los materiales fueron transportados hasta ahí en helicópteros. Se usó una resina especial para unir las piezas estructurales y así minimizar el uso de elementos pesados, como bulones.
Uno de los principales escollos a salvar fue cómo proveer energía al sitio de una manera eficiente. Para esto, la forma ovalada del bloque fue fundamental, ya que los vientos (que pueden alcanzar velocidades de hasta 300 kilómetros por hora) inciden sobre la piel externa y así logran que la nieve se escurra y caiga en una grilla de 60m2. Una serie de paneles solares colocados sobre la montaña derriten la nieve que se almacena en una serie de tanques, que pueden contener agua hasta 16 días sin necesidad de que se vuelva a llenar. Los paneles también le darán calor y electricidad a los ambientes interiores.
El Refuge du Goûter también contará con seis inodoros internos y ecológicos, diseñados para ahorrar la mayor cantidad de agua y disponer de los deshechos de una manera orgánica. Con este fin, está previsto que utilicen el agua que fue usada para la cocina y el lavado. En el refugio anterior había solo dos inodoros, que se encontraban afuera del volumen principal y eran además una fuente de polución, ya que se vaciaban directamente a la montaña. Con un triple aventanamiento y aislado con paneles de madera resistentes al fuego, la temperatura interior oscila entre los 18 y los 22°. Para finalizar, hay que agregar que esta estructura costó 6,5 millones de dólares y que fue financiada por el Club Alpino Francés, que ha comenzado a introducir sugerencias a sus filiales para que todos sus edificios sean construidos de forma sustentable.
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